Sobrecupo, jueces cansados, falta de médicos y múltiples caídas del sistema, fueron algunos de los problemas que presentó el Primer Campeonato Abierto de Taekwondo "María Espinoza", evento que terminó alrededor de las 6:00 de la mañana del día siguiente por los constantes retrasos.
El torneo inició en tiempo, cerca de las 9:00 de la mañana del sábado 29 de septiembre en sus dos modalidades, para aquellos que fueron a luchar por puntos en el ranking nacional y los que compitieron en el campeonato abierto.
Los problemas aparecieron inmediatamente, pues desde la primera pelea de la categoría infantil hubo problemas con el sistema de los petos electrónicos, mismo que había sido promocionado como uno de los mayores atractivos del evento.
Varias áreas fueron las que presentaron el problema que tardó varios minutos en solucionarse, aunque más tarde hubo una caída total del sistema que volvió a detener todas las áreas.
De igual manera, en el área de gráficas hubo un constante caos con competidores, coaches y público entrando y saliendo, misma situación que tardó en ser controlada por elementos de la empresa 4-Pro, quienes estuvieron a cargo de la logística.
Casi 24 horas de torneo
Cerca de las 4:00 de la tarde apenas estaba concluyendo la categoría infantil y parte del campeonato abierto que incluso ya estaban compitiendo con petos convencionales; para las 8:00 de la noche, aun se estaban peleando semifinales de la categoría cadetes.
La desesperación y frustración por parte de las delegaciones era evidente, pues la mayoría llegó desde muy temprano a la CDMX de todas partes del país y tuvieron que esperar muchas horas para competir "encerrados" en la Sala de Armas, sin un lugar apropiado para poder descansar o comer.
Durante los combates de la noche, los asistentes hicieron notar su descontento por la situación mediante chiflidos, aplausos, gritos y reclamos desde las gradas.
Algunas delegaciones que esperaban competir en juveniles y adultos, como los Aztecas de la UDLAP, prefirieron abandonar el torneo sin pelear renunciando a competir por sumar puntos en el ranking nacional, debido a que no se veía el fin del torneo ya cerca de la 1:00 de la madrugada.
Por lo anterior, las categorías juveniles y adultos presentaron ausencias que entorpeció aun más el evento, además de las fallas del sistema que nunca se detuvieron.
Por su parte, los jueces denunciaron que los llamaron desde las 3:00 de la mañana del sábado y no pararon su jornada hasta las 6:00 de la mañana del día siguiente.
Además de pedirles que se presentaran de nuevo a las 8:00 de la mañana del domingo para iniciar con el segundo día del torneo.
Sin personal médico ni de seguridad... ni María Espinoza
Muchos abandonaron las instalaciones durante la noche, entre ellos María del Rosario Espinoza, organizadora y figura publica del evento.
La multimedallista olímpica fue criticada por su ausencia y comparada con Iridia Salazar, pues la gente argumentaba que Iridia si permanece todo el tiempo en sus eventos.
Aunque el resto de seleccionados nacionales permanecieron más tiempo, igualmente se retiraron antes; a excepción de Fabiola Villegas quien estuvo casi hasta el final en el área de premiación.
Por su parte, personal de seguridad y médicos también se retiraron durante la tarde, dejando a los taekwondoines sin su resguardo, lo que provocó aún más problemas.
Durante las últimas peleas se registró el desmayo de un competidor y un dedo fracturado de una competidora de Nuevo León durante una de las finales de juveniles femenil.
Este último caso tuvo que esperar cerca de 15 minutos a que llegara una ambulancia ajena al torneo para ayudarla.
El primer Campeonato Abierto de María Espinoza quedó manchado por la pésima organización que mostró y dejó a la gente con molestia un sabor amargo respecto a la taekwondoin mexicana.
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